La primera vez que escuché con interés un viaje a Japón fue a Javi, alias PPJA, en nuestro grupo de party anual, explicando como era Yamaguchi y algunos tópicos sobre Japón. -A ver si vuelves a visitarnos en la Encounter 20, qué se te echa de menos!
Por entonces aún no me planteaba viajar a Japón. Pero seguro que fue
una semilla más en mi cabeza, de tantas a lo largo de la vida, que materializó mi viaje por Japón de la forma en que se hizo el pasado mes de octubre.
Preparar un viaje a Japón no es fácil, sobre todo
la primera vez. Más que nada por las dudas que se te plantean sobre los sitios a visitar, la comunicación y el modo de vida para comer, dormir o aclararse con los transportes.
Cuando tuve claro los días que iba a estar por Japón me di cuenta de que eran totalmente
insuficientes para ver todo, o la mayor parte de aquello de lo que había oído hablar del país.
Sin embargo, me las apañé para ver dos o tres sitios atípicos (quizás más ;) Ya lo contaré). Y sobre todo asumí mi propia ingenuidad, y las de otros antes de viajar a Japón, al preguntar a quienes habían estado antes ¿por qué no visitaron tal sitio, o tal otro?
Como sabréis los más atentos a mi blog (es decir Oyashiro-sama y yo... y para de contar), mi atracción por Japón me pegó muy fuerte gracias al mundo del manga-anime al que me aficioné tardíamente gracias al juego de DDR (Dance Dance Revolution) Stepmania a principios de 2007. Que a su vez vino provocado por ver, a lo largo de muchos años, a otakus aficionados a estos
juegos musicales japoneses en cada edición de la Euskal Party o Euskal Encounter.
No hay una sola razón para lo que hago. Nunca la hay. Siempre
pienso mucho las cosas. Demasiado.
La decisión de comprar mi primera alfombra de baile la tome tras ver "La máquina de bailar". Así que, gracias a
Santiago Segura por producir la película y participar en ella. :) Aunque Japón o los japoneses en esa película son algo anecdótico con los que hacer humor original, como en
Humor Amarillo.
Sin Oscar, alias
bakala2, el más otaku, hasta las trancas, también de nuestro grupo de party
SOGA, jamás habría conocido varios animes que llegué a ver. Generalmente de estilo ecchi. Que, debo reconocer, es uno de los géneros más atractivos del anime, porque hace reir y alegra la vista.
Precisamente el primer "gashapon" (figurita de un anime en caja-sorpresa) que compré pertenecía a "
Dokuro-chan, el angel castigador". Con el que Oscar y yo nos echamos unas risas viendo su secuencia inicial una y otra vez.
Hasta ese punto, digamos que mi interés en el país del lejano oriente era escaso. Pero mi subconsciente ya había sido apaleado por famosas obras de la animación japonesa y gran parte de la tecnología, y juguetitos que han llegado a España durante el transcurso de varias décadas.
Aún no sé muy bien por qué, de pequeño, siempre me acercaba al letrero de un banco para
consultar con frecuencia la cotización del Yen Japonés. También miraba la Libra Esterlina y aún no he pisado Gran Bretaña, de todas formas.
Gracias a
Iñaki, alias
Outvader, y otros amigos aficionados al mundo otaku, vi el anime
Death Note. Y aquí sí que podríamos decir que se produjo un punto de inflexión que me hizo volver la mirada hacia Oriente.
Tras ver Death Note pensé que esa pieza sería una excepción; Una ecuación no balanceada connatural al mundo del manga. Una anomalía, vamos. Pero, cuando arañé un poco la superficie del mundo del manga y anime, practicamente me explotó en la cara. Existen miles y miles de obras de manga japonés de diversos géneros para todos los gustos. Y se produce anime para parar un tren no cada año sino cada trimestre más de medio centenar de series distintas nuevas, o que prosiguen temporadas de éxitos anteriores.
Poco después de ver Death Note; a mediados o finales de 2007 vi Elfen Lied, Ouran High School Host Club y Higurashi no naku koro ni.
He visto desde entonces cerca de un centenar de obras, películas y series distintas que ya han sido comentadas en
Otro Blog de Anime, que impulsé poco después de ver estas series. Pero yo diría que esas primeras obras representan muy bien mis gustos y que todas ellas y alguna otra han estado presentes en mi primer viaje por Japón.
Gracias a Carlos, de NTS/Doocuments, pude retirarme un tiempo para conocer mejor algunos rincones de Madrid
a finales de 2007 y trabajar en mis proyectos de cine en un ambiente relajado y alejado de mi rutina habitual. Además de trabajar un par de semanas en cohesionar mi primer guión pude revisionar alguna serie como Ouran High School Host Club donde se resaltan los arquetipos de personajes combinados en la historia exagerando peculiaridades de la sociedad japonesa. Aquel viaje en particular, que se prolongó un mes entre Madrid y Alicante por mi cuenta, me sirve como
punto destacado en la memoria para recordar el momento en que me volví, o salió de dentro de mí, el otaku que soy ahora.
También destaco la influencia de otro Carlos, alias Wretched, al que ya agradecí el empujón involuntario que me dio en mayo de este año cuando cenando en su casa nos ofreció a los amigos las típicas galletas chinas de la fortuna y me tocó esa de "
Buen momento para iniciar tus sueños". Creo que no pasó ni una semana hasta que compré el billete de avión para Japón. ;) Y por supuesto a todos los amigos
Eduardo, Hugo, Mónica, Miguel y el legendario David que durante todas las semanas no solo me han aguantado hablar de mis planes de viaje a Japón sino que también los han alentado y envidiado al tiempo que compartimos aficiones comunes.
Higurashi no naku koro ni tiene también capítulo aparte en este blog. Y descubrir que el idílico escenario donde se dan truculentas y violentas situaciones realmente existe en Japón, Ogimachi (Shirakawa-go - Patrimonio Historico-Artistico de la Humanidad por la UNESCO) provocó ya entonces que lo quisiera visitar a toda costa.
Ya por entonces
Mamomo, y sus amigos
Andreu y David, más o menos al mismo tiempo que Jon, hermano de Outvader junto con otros viajeros, fueron a conocer la fascinante "tierra prometida" del otaku. Algunos solo estuvieron por Tokio y alrededores, otros llegaron hasta las "lejanas" tierras de Miyajima, pasando por Kioto o Nara.
Sin duda Mamomo, ya tenía hincado el aguijón de la fascinación por Japón desde que vio
El viaje de Chihiro (2001) y aunque yo vi la película y otros famosos largometrajes después, bajo su influencia, no llegó a abrir mi apetito por el anime del todo hasta el momento en que él se fue a Japón. Aunque siempre fui fan de todo tipo de animación y videocreación.
Parece que a finales de 2007 Japón atrajo a mucha gente
Con muchos pude hablar largo y tendido. Interrogándoles para que
me contaran su viaje con pelos y señales. Y siempre quedándome con ganas de que me contasen más cosas; Al estilo de Nº5 de la película Cortocircuito: -Datos, Datos. Quiero más datos!!!
También estoy super agradecido a
Eva, quien impulsó en Tudela un festival Senbazuru tras el desastre de Tohoku, como gesto de gratitud al país que le acogió en su viaje de estudios del curso anterior. Junto con su profe, Aya y demás compañeros de sus clases de japonés.
Mire donde mire sólo veo Japón por todas partes. :)
Eva me facilitó a pocos meses de mi viaje un sin fin de folletos y mapas de sus rutas turísticas por Japón. Y aunque no tuve tiempo para ver muchos de esos sitios por dentro, especialmente en Kioto, sí que pude verlos por fuera con una mirada de propia seguridad de que en un próximo viaje los visitaré por dentro con calma.
Poco a poco a otros amigos y a mí nos reconcomía el gusanillo de visitar Japón. Se afianzó poco después de ver en la Euskal Encounter el corto Made in Japan y el documental Hobby de
Ciro Altabás. (Alabados seais los artífices de la película junto con los co-productores ejecutivos Flapy y Kirai!) Proyección que aquel día de verano auspició la asociación RetroEuskal, por su contenido altamente "friki-retro" y "8bits". Además Ciro me aclaró alguna inquietud que tenía sobre alojamientos en "guesthouses" o dormitorios comunes.
El amigo Juanve, con cuarto dan de ninjutsu (aunque los ninja de las películas nunca existieron :)) y sangre japonesa en sus venas de Coria del Río, también quería venir conmigo en el primer viaje y nos comprometimos a hacerlo junto a su primo y quien quisiera subirse al carro. Eso me motivó para crear un "Wiki" para cohesionar datos sobre el viaje que nos podrían ser útiles a nosotros y a cualquiera que quisiera visitar Japón. WikiJapón (Algún día lo resucitaré. Por hackeos continuos está en "hibernación").
El wiki no sé si sirve para muchas otras personas y no hubo muchos aportes pero fueron de gran utilidad las que entre otros aportó Xabier, alias
Xabo taje. Con el que apenas me comunico salvo para avisarle cuando algún virus afecta a su sistema de correo. ;) Y al que conocimos Outvader y yo en las ediciones a las que acudimos del FAN, en Pamplona desde 2008.
Festival de Anime que por supuesto es "culpable" de agrandar más nuestro apetito por este mundo y todo lo relacionado con Japón. Muchas gracias a
Juan Zapater,
Blanca y todos los colaboradores del festival. En especial,
Efraín que a pocos meses de mi viaje también me dio algún que otro consejillo y resultó en lo que mi viaje por Japón fue al final.
Tampoco hay que restar agradacimiento al sin fin de actos otaku que se organizan en toda la geografía nacional desde hace años. Y que también desde 2008 visito asiduamente, exceptuando el Salón del Manga de BCN de este año, porque yo estaba ya visitando el "Origen" de todo. ;))
Las
Jornaícas de Zaragoza fueron un fantástico punto de encuentro, los últimos cuatro años, con más gente con un gusto similar por Japón. Y es ahí donde conocí a algunos de los colaboradores de la organización y a podcasteros como
stif, que conllevó desvirtualizar a todo el equipo de
La Hora Otaku, en el pasado Salón del Manga de BCN, en 2010. Auténticos pioneros del podcasting sobre Manga y Anime en España y no unos imitadores como Ramen para Dos, con su radio profesional. (O eso creo que le gustaría que dijera a Stif ;))
La legión de reporteros de
Ramen para Dos, y otros blogueros conocidos por las
Redes Sociales fueron evidentemente de mucha ayuda a la hora de recopilar información para mi viaje:
- El omnipresente blog de Kirai, junto a su libro Un geek en Japón.
- Flapy y su video-curso de japones, Japoneando.com
- El Capitán Urias catalizando el movimiento TLQM por el que nos hemos conocido, al menos virtualmente, muchos adscritos a la ideología molona, al que le doy un agradecimiento muy especial, además de por su dinámico y divertido videoblog La Arcadia de Urías, por su extensa respuesta a mis cuestiones sobre el viaje por formspring.me y su documental Crónicas desde Cipango donde aparecen otros famosos blogueros.
- Ale, alias Karawapo, por ser tan pasota y tan majo a la vez. Además de artífice accidental del movimiento Todo Lo Que Mola. Gracias por dar un contrapunto alejado del bloguero afincado en "MonstruoCiudades" de Japón. También por su charla, casi olvidada, sobre emprender en Japón que pude ver parcialmente retransmitida por internet desde la Universidad de Alicante. Por sus canciones chiptuneras de la Gameboy-Rock Band Pepino. Y su A Japón Volveré. (que ya es mi lema ;)) Y por sus video-podcasts-cursillo Escucha Japonés con Ai y las gameboy musicales y Escucha Español, junto con Magi.
- De Marc Bernabé. ¿Qué decir? Me fijé cuando vi que los pocos manga que tenía en mi colección y casi todos los libros para aprender japonés de mi biblioteca los había escrito o traducido él. Un apasionado por el manga; y fascinado como todos los demás por ese país junto al anillo de fuego del Pacífico, entre mares y montañas. Si además le sumas sus interesantes entradas blog en MangaLand, Niponadas, el ambicioso proyecto Masters of Manga, la republicación de Apuntes de Japón, y el sin fin de vídeos que nos ha regalado la "coña marinera" del movimiento TLQM; sólo cabe una gran reverencia desde el suelo al más puro estilo japonés, Bernabé-sama!
- Alessandra, alias Chiisai y su Portal Japón, también ha facilitado mucho la vida del otaku con ansias por viajar a Japón. Gracias a sus chibicharlas, donde pudimos reunirnos virtualmente centenares de otakus chibi-viajeros en ciernes o veteranos que también nos han sacado de dudas entre millares de preguntas que planteábamos sobre el modo de vida en Japón y lugares que ver. Durante horas y horas, a lo largo de muchas noches cada semana. Gracias a todos los que allí estabais. También la charla de Chiisai en el Salon del Manga de 2010 algunos de sus comentarios me sirvieron para no demorar más mi viaje debido al curro de JuanVe que estaba provocando un retraso indefinido que iba camino de convertirse en dos años de demora. Y me animé a hacer el viaje en solitario.
- También en el Salón del Manga de 2010, el conocido como embajador del anime, Takamasa Sakurai (trágicamente fallecido en diciembre 2015), dio una estupenda y entretenida charla sobre Peregrinaje Anime a Japón. Que dio pistas para el viaje aunque por entonces aún no sabía cuando lo haría. Y fue una charla memorable que no olvidaré.
- Cesar y (su ex-) Laura, que en las Jornaicas ya me firmaron su libro Tokio para Otakus, y volvimos a coincidir varias veces tanto en Barcelona como en Pamplona en actos similares. Su libro fue una gran inspiración y empezó de forma similar al WikiJapon. Como un plan para viajar allí. Que ya se ha extendido con una segunda parte llamada Kioto para Otakus, que estoy deseando agenciarme. :) Me encantó la Toei Gallery. Que seguro me la habría perdido de no ver vuestro libro.
- Muchos más blogueros y tuiteros que viven y narran su día a día desde Japón en castellano y que me es totalmente imposible enumerarlos pues no sé cuántos blogs habré "lurkeado", sin pararme a dejar un simple comentario, en mi ansia por aprender más del "Cercano Oriente", entre los que están, seguro: Ikusuki, Micko, UnGatoNipon, Takeshi Taniguchi, y muchos etcéteras.
- Danny Choo es también famoso extranjero viviendo en Japón que cultiva su pasión por la vida en Japón y además de su blog en inglés, ofrece también desde hace poco artículos en español.
- Así mismo es inestimable el apoyo que he recibido de más gente que ya ha viajado a Japón como turistas, incluso más de una vez, o tiene idea de hacerlo tarde o temprano y comparte su experiencia por Twitter y otras redes. Evidentemente esta lista es mucho mayor, pero gracias a ellos he hecho grandes contactos, o aprendido más sobre Japón a través de sus blogs, fotos, vídeos o micro-charlas tuiteras. Un millón de gracias. Julencin2000, Quicoto, elPachinko, comerJapones, AdriaMontiel, misstechin, Roberto_Pastor, Tarazonando.
También a allegados y
parientes que en muchos casos se mostraron comprensivos con mi intención de visitar Japón. Aunque algunos me decían -no vayas, sobre-alarmados por las exageraciones de la prensa occidental por los efectos del Gran Terremoto de Tohoku. Y algún otro me decía -Quédate allí; No vuelvas. Que no sabría cómo interpretar. :)
También doy las gracias a mi banco, que me amplió el límite de la tarjeta de crédito dos veces este año, sin pedirlo. (Cabrones! Lo digo desde el más profundo cariño y respeto. -¡Claro, claro! Si no lo quiero no lo cojo. Pero si te lo dan lo coges, ¿no? Como los corruptos políticos que aceptan lo que sea a cambio de ciertos favores.)
Gracias, sin duda, a Santiago Gastaminza por su charla en Tudela y Pamplona sobre Japón que me ayudó a ver el país desde otro punto de vista, al margen de la generación de blogueros que hablan de lo que les preocupa a ellos. En esa ocasión nos acercó unas cuantas vivencias del día a día en el Japón menos conocido, como era Yamaguchi donde estuvo trabajando. Habló especialmente del hermanamiento entre Navarra y Yamaguchi; y los trabajos que hacen cada año los escolares sobre Francisco Javier. A mí me quitó algunos mitos que me había formado sobre la forma de hablar de distintas regiones de Japón; y fue gracioso verle comentar precisamente al alcalde y directivos del centro acerca de que los mismos políticos de Yamaguchi propusieron bajarse el sueldo. Cosa que ni pasa por la cabeza de políticos de otros lugares del mundo.
Gracias a Marita, la directora de
mi primer colegio que me puso en contacto con su sobrino residente en Japón. Y gracias a él,
Iñaqui. Que fue el primer español que vi allí (de al menos 13). Y tuvo tiempo en su apretada agenda laboral para que diéramos un paseo por el barrio chino de Yokohama; y me recomendó la visita a Enoshima desde Kamakura. Algo que tenía programado pero de no ser por su insistencia quizás no habría llegado a ver lo más alto de ese fantástico lugar. Y gracias a su colega de trabajo
Ken; Mi primer amigo japonés, jeje, aunque no entendamos casi nada del idioma del otro. ;)
Gracias también, por supuesto, a Paco y Loli de Granada, que encontré por Kioto y me ayudaron a completar un día que había quedado truncado al suspenderse el Jidai Matsuri. También muchas gracias a Antonio, de Madrid y su pareja, que creo recordar procedía de Burgos, que me recomendaron el complejo de restaurantes
Okonomi-mura para probar el Okonomiyaki en Hiroshima. Y gracias a Teo y Lee, de Singapore que me hablaron del templo de Takayama y me facilitaron un plano para la hora y poco más que tenía libre en el lugar, y la pareja de jubilados de Shikoku que nos regaló a los tres que estabamos en Shirakawa-go, un buen montón de
mikan (o mandarinas). Gracias a
Umberto, de Barcelona, y los dos amigos Colombia que encontré en la Fuji TV y provocaron algún momento divertido en mi viaje. Como cuando hablando a voces en español me fijé como nos miraban algunos japoneses; y también la mirada que echaron algunas señoras al decir "oshiri" como quien dice "trasero" pero de forma que no se entendiera tanto... jeje, pero olvidaba que estaba en Japón. B-D
Y a todos los demás amigos o compañeros de viaje que hice por el camino que me dieron conversación; como el grupo de japoneses que iban en el tren de Takayama a Nagoya llenando un vagon de viejos alumnos de una universidad que viajaban todos los años por distintos lugares, incluido España en varias ocasiones. Y a los cuatro malagueños con los que pude charlar un rato en lo alto de la torre Landmark. Aunque a algunos compañeros de viaje no llegué ni a verlos, pero seguro que nos desvirtualizamos un día, eh,
Javi, alias アリスチン覇比 en Twitter. Gracias también por estar ahí. ;)
En serio que sin todos ellos, y los que me dejo (que puede deba añadir después al decir: -Toma claro! él o ella también me ayudaron!) que me darán una paliza hasta dejarme toda la piel negra de moratones por obviar u olvidar incluirles, no habría podido pasar las mejores dos semanas de mi vida. Y además descubrir que el primer viaje a Japón no tiene porqué ser el último.
¿Os apuntáis al próximo? :)