Vigilar el pasado

Si mandásemos un satélite a medio año luz de La Tierra dotado de un inmenso espejo, al apuntarlo hacia nosotros y observarlo desde nuestro planeta, sería posible observar nuestro pasado un año atrás, a partir de seis meses después de que el espejo se hubiera colocado en posición.

Sería muy difícil mantener una órbita similar a la geoestacionaria a tanta distancia para que la imagen no se perdiera pero, oye, esto es sólo mi imaginación. ¡Puedo imaginar lo que quiera!

Con una tecnología así sería posible obtener pruebas para un juicio, descubrir las causas de cualquier robo o asesinato en la calle sin testigos. Sería como tener un ojo omnipresente que vigila nuestras calles.

Películas del estilo "Minority Report" podrían tener como protagonista este satélite mirón y también otras películas inspiradas en historias bíblicas donde el "Señor" está ahí arriba, en el cielo, vigilando.

Supongo que casi todos actúan de distinta forma si saben que les están mirando. Yo lo hago. Si veo una cámara saludo y sonrío. Por eso casi siempre salgo sonriendo en las fotos.


Pero estar siempre vigilado con un Gran Hermano pendiente de que no te salgas del camino no creo que sea para nada conveniente. En especial porque también depende de quien controle ese Gran Ojo e interprete lo que ve a su manera.

El invento tiene un potencial valiosísimo para conservar la historia del mundo. Pero los aspectos negativos serían que las personas no actuarían con la misma libertad que si nadie estuviera observándoles desde una sala de "justicia" del futuro y donde sus actos de hoy podrían conllevar una pena por leyes que aún no existen.

Ahora mismo estaría bien observar a Urdangarín y Teddy Bautista hace ocho años y dejar claro que ciertas asociaciones e instituciones no sirven a quien dicen servir.

Tambien estaría bien observar los chanchullos que hacen constantemente los políticos con mala-gente que se aprovecha de su influencia para garantizarles un vida-mejor una vez terminada la vída política de un sinvergüenza político a cambio de mutuos favores.

Sin necesidad de entrar en la Ciencia-Ficción ya podemos observar momentos congelados del pasado gracias a los coches de Google y su Streetview. Podemos cotillear mil y un rincones del planeta y encontrarnos con cosas realmente curiosas. Algo por lo que los más estrictos alemanes ya han ejercido una firme oposición, da igual que sean de Google o de Microsoft.

¿Tienen los alemanes algo que ocultar o saben algo que nosotros no?

Quizás estas imágenes pueden favorecer el espionaje industrial o especulativo y poner en riesgo las inversiones de ejecutivos importantes de cada país.

Pero son demasiadas conspiranoyas.


Lo que sí hay es una larga lucha entre "libertad" y "represión". Dos conceptos que aún no se comprenden bien del todo. Y por lo general ambas ideas son peligrosas, como distintos filos de una misma navaja.

Por un lado no se puede permitir que los locos vayan sueltos por ahí haciendo locuras. Pero tampoco se puede tolerar que se impida a todo el mundo actuar libremente por culpa de unos pocos locos.

Me gustaría encontrar el termino medio, pero creo que es muy difícil. Y "partir el niño en dos" sería muy cruel.


No pueden pagar justos por pecadores. Las decisiones salomónicas son lo peor de lo peor. Y ese tipo de decisión es la que suelen tomar siempre los políticos y dirigentes.


Creo que estaría bien que los gobernantes mirasen al pasado, en tiempos de la Antigua Roma, para observar cómo los más altos dirigentes hacían lo mismo que hacen ellos ahora; Encajar golpes con una sonrisa por decisiones políticas a cambio de fortunas y comodidades, aunque por entonces su "poder" solía durar poco y costarles bastante caro.

Cerca de 40 emperadores romanos dejaron su cargo a la fuerza, con los pies por delante,  al ser envenenados, ejecutados, ahogados o apuñalados y alguno llegó al suicidio.

Si nuestros políticos vivieran en esos tiempos del pasado dudo que aceptasen sus pensiones vitalicias después de gobernar el país. Tal vez como muestra de "buena voluntad" al pueblo al que representan, y sobre todo para recibir algo de piedad de los de su "especie".

Afortunadamente el pueblo ya tiene el poder. Gracias a las tecnologías de comunicación masiva a través de Internet; Donde un ciudadano observa y miles responden ante cualquier injusticia.

En realidad no hace falta tener satélites en la Luna. Sólo personas en el mundo.